Muchas personas en la actualidad, llevan a cabo ejercicios de pilates, tanto en centros especializados, como en casa. Esta actividad con el paso de los años ha ganado muchísima popularidad hasta llegar a la era tecnológica en la que se ofrecen clases por redes sociales.
Sin embargo, a pesar de tener tanto reconocimiento, muy pocas personas saben en realidad cuál es el origen del pilates. Esta disciplina tiene toda una historia detrás que merece la pena conocer. A continuación, te daremos un recorrido por la historia del pilates, su creador, características y más.
Joseph Pilates: el creador de este método
El pilates es una forma de entrenamiento para el cuerpo y la mente creada por Joseph Hubertus Pilates. Este hombre dio a conocer el pilates durante el siglo XX. Para el diseño de este método, Pilates se inspiró en influencias del yoga, la gimnasia, la fuerza muscular y la traumatología.
Todos estos elementos, los enlazó con el trabajo de la mente, la respiración, la relajación y el control del cuerpo en función de esto. De hecho, vale decir que, inicialmente, no se le conocía como pilates, sino como “contrología”, pues su principal finalidad era conseguir los objetivos por medio del control mental y físico.
Esta interesante disciplina hace énfasis en el desarrollo de la musculatura interna, lo que repercute en la capacidad de mantener el equilibrio y fortalecer, entre otras cosas, la columna vertebral.
La evolución del pilates
El origen del pilates marca su punto de partida en Joseph Pilates quien desde muy pequeño presentó diferentes problemas de salud. Gracias a sus problemas con el asma y el raquitismo, Pilates decidió empezar estudios sobre el cuerpo humano y la manera de ganar fuerza mediante la actividad física.
Gracias a esto, pudo convertirse en un atleta de buen rendimiento el cual tuvo que poner en práctica cuando fue internado en un campo de batalla en Inglaterra durante la Primera Guerra Mundial. Su trabajo de enfermero en aquel momento, lo llevó a profundizar sobre los músculos y cómo mejorarlos con ejercicios.
Pilates puso en práctica diferentes actividades con el fin de contribuir en la recuperación de los enfermos que llegaban a las camas de resortes y colchonetas para ser tratados de distintos problemas derivados de la guerra. Implementó las poleas y cuerdas que tenía a disposición para crear máquinas rudimentarias de pilates.
Con el paso del tiempo, muchas de estas máquinas dieron paso a los aparatos que usaría para pilates durante toda su vida, como el barril, la silla y la máquina reformer, que es una de las más novedosas y de donde nace el actual pilates reformer.
A medida que el tiempo fue pasando, Pilates creó múltiples ejercicios para que tanto él como otras personas, pudieran llevarlos a cabo encima de colchonetas. De ahí en adelante, se propuso crear un estudio de enseñanza y lo consiguió en Estados Unidos, en el año 1923 con el apoyo de su esposa Clara.
El pilates en libros para la historia
Además de abrirse paso en Estados Unidos con su centro de pilates, Joseph escribió dos libros “Tú Salud” (1934) y “Regreso A La Vida A Través De La Contrología” (1945).
El primer libro habla sobre las teorías de Pilates en cuanto a la actividad física y su relación con la salud. El segundo libro, por su parte, era un manual de 34 ejercicios de pilates básico que cualquier persona podía realizar desde su casa sin mayor problema.
Este segundo libro es uno de los más importantes, pues muestra de manera simplificada lo que Joseph Pilates venía trabajando durante mucho tiempo. Además, los ejercicios que ofrecía en la guía se podían hacer sin necesidad de contar con las máquinas.
El pilates después de la muerte de su creador
Si hay algo de cierto en la vida es que somos el legado que dejamos. Por eso, aunque Joseph Pilates haya muerto en 1960, su creación tuvo continuidad de la mano de su esposa Clara, quien tomó las riendas del centro en Estados Unidos.
Una particularidad es que Pilates no impartía sus conocimientos con el fin de que en el futuro existieran nuevos profesores, sino como un método para mejorar la calidad de vida. No obstante, muchos de quienes lo conocieron se abrieron paso como monitores de pilates en sus propios estudios.
Los dos discípulos más relevantes de Pilates fueron Lolita San Miguel y Kathy Grant que se certificaron profesionalmente. Asimismo, es importante hablar de otro estudiante de Joseph, Ron Fletcher, quien desarrolló un estudio de pilates en Beverly Hills, lo que hizo popular el pilates entre las estrellas de Hollywood del momento.
Estos estudiantes de la primera generación fueron piezas claves para extender hasta nuestros días lo que Joseph Pilates quiso ofrecer al mundo. Sin embargo, la segunda generación no se quedó atrás y también logró cosas importantes.
Algunos de los nombres más destacados son el de Eve Gentry, que ofreció sus clases profesionales en la Universidad de Nueva York y Carola Trier, que abrió su estudio y logró la aprobación de Joseph Pilates, quien se encontraba con vida aún.
Retos de la evolución del pilates
Si bien es cierto que el pilates se ha reconocido mundialmente y sus beneficios se han comprobado, en estos tiempos uno de los retos más grandes es encontrar profesores realmente capacitados. Hay deportistas, bailarines y muchos otros que ahora mismo dan clases de pilates sin ser profesionales, lo que quizás ha desvirtuado un poco su esencia original.
En este sentido, es importante comprender la relevancia de certificarse antes de ofrecer sesiones de pilates. Esta actividad requiere de un enfoque multidisciplinario que no puede tomarse a la ligera. Actualmente, hay escuelas de formación reconocidas como la Asociación Nacional de Entrenadores de Pilates, Gimnasia y Yoga que ofrece certificaciones como Instructor de Pilates totalmente reconocidas.
Promover la capacitación profesional es una forma de dar continuidad a lo que en su momento, Joseph Pilates dejó establecido.
